Ya durante su carrera interpretativa, Reagan se inmiscuyó en asuntos políticos: presidió el sindicato de actores del 47 al 52, y, posteriormente, en el 59. Eeran años difíciles para Hollywood con el Comité de Actividades Antiamericanas al acecho. Curiosamente, en esta época Reagan tenía simpatias demócratas; quizás no tenga nada de curioso, y debamos incluir a Reagan en esa masa de trabajadores blancos que se pasaron a los republicanos durante los 60 y 70. Uno de los principales baluartes del GOP, el anticomunismo, le llevó a apoyar las candidaturas de Eisenhower y Nixon; pero cuando los demócratas regreasaron a la Casa Blanca después de ocho años de la mano de JFK, Reagan decidió pasarse oficialmente al partido del elefante.
Ahora regresaremos al origen de nuestra historia: Barry Goldwater. Reagan empezó a destacar en la campaña presidencial republicana del 64. Aquí nuestro héroe ya expresó las líneas básicas de su ideario: "Los Padres fundadores sabían que un gobierno no puede controlar la economía sin controlar a la gente. Y sabían que cuando un gobierno se decide a ahcer eso, tiene que usar la fuerza y la coerción para lograrlo. Así que ha llegado el momento de elegir". Así, Reagan atrajo la atención de los republicanos de California, y fue elegido para ser el candidato republicano para Gobernador de California. En la elección, derrotó al Gobernador demócrata que se presentaba a la reelección, Pat Brown, que cuatro años antes, en 1962, había derrotado a Richard Nixon. Era particularmente sorpredente que un actor sin experiencia política lograra derrotar a un exitoso Gobernador; el carisma de RR empezaba a hacer milagros.
Reagan ocupó el cargo del 67 al 75, durante los que actuó como un republicano conservador: se declaró pro-pena de muerte, pro-vida (aunque al inicio de su mandato firmara el "Acta de Aborto Terapéutico" según él, por falta de experiencia) y erradicó de forma violenta los disturbios en la Universidad de Berkeley: si había algo que el "americano medio" odiaba tanto como la guerra del Vietnam, eran los manifestantes contra la guerra del Vietnam.
Antes de lograr la candidatura republicana de 1980, Reagan había perdido ampliamente la de 1968 y de manera muy ajustada (1187 delegados contra 1070) la de 1976. Ya con el apoyo de su partido, Reagan debía derrotar al Presidente Carter, y, a pesar de que este era bastante impopular, un Presidente siempre es un Presidente: muchos han logrado mantener el Despacho Oval de manera sorprendente (Truman, y más recientemente, W. Bush). Sin embargo, Roosevelt superó los pronósticos de los más optimistas: obtuvo el 50,7% de los votos y 44 estados (489 delegados) por el 41% y 6 estados (49 delegados) de Carter, la mayor victoria obtenida jamás contra un Presidente. Además, los republicanos lograron hacerse con el Senado por primera vez desde 1952. Buena parte de la victoria se la puede basar en el particular carácter de RR: su increíble confianza en sí mismo castigaba una y otra vez al pobre Jimmy Carter: declaraciones como "Me han dicho que no utilice la palabra depresión. Bueno, os diré la definición. Recesión es cuando tu vecino pierde su trabajo; depresión es cuando tu pierdes el tuyo. Recuperación es cuando Jimmy Carter pierde el suyo!" o "¿Estás mejor ahora de lo que estabas hace 4 años?" nos dan una idea bastante clara del rol que adoptó Reagan: algo bastante importante, ya que este es el modelo de "Presidente ideal" que la Revolución Conservadora iba a asumir a partir de aquel momento. El mismo George W. Bush está construido a partir de ese modelo. Para entendernos, la idea sería ganar en aquello de "¿con qué personaje famoso te tomarías unas cañas?": resultar simpático y cercano.
Muchas actuaciones de la presidencia de Reagan fueron liberales (recorte de los impuestos, oposición al comunismo) pero, sin embargo, hay quien olvida que, a diferencia de Europa, en EEUU no existe una tradición pre-capitalista y por ello es normal que un conservador norteamericano sea tan antiliberal socialmente como liberal económicamente: y para demostrar esto no tenemos más que recordar la diatriba moralista de Reagan o su guerra contra las drogas: rasgos que comparten todos los republicanos, salvo algunas honrosas excepciones (Ron Paul). Durante su presidencia la economía se recuperó moderadamente, lo que representó un gran alivio después del via crucis económico que fueron los años 70; las famosas Reagonomics lograron parar el azote de la inflación, pero no llevaron a una década dorada como los 60 o los 90.
En el año 1984 Reagan logró la reelección con la segunda mayor victoria en delegados del siglo XX (la mayor fue la de Roosevelt en el 36; no es un mal compañero de viaje). Mondale, el candidato demócrata, sólo logró ganar en su estado natal de Minnesota y en el Distrito de Columbia. Reagan había vuelto a arrasar con su carisma a su rival; cuando en un debate se le preguntaba si la edad podía suponer un problema para el presidente (Reagan en 1984 ya era el Presidente más mayor que jamás hubiera ocupado el cargo) respondía: "No pienso hablar de la edad en esta campaña. No voy a explotar, por motivos políticos, la juventud e inexperiencia de mi rival". Toma.
Reagan se ha convertido en el símbolo de la Revolución Conservadora, o Reagan Revolution. A propósito, si queréis comprar la camiseta, podéis hacerlo aquí.
Pero si por algo va a ser recordado Ronald Reagan es porque durante su presidencia se produjeron los cambios que acabaron llevando a la caída de la URSS. Aquí Reagan hizo un papel similar al de Nixon con China: igual que sólo un anticomunista tan acérrimo como Nixon podía pactar con Mao sin que nadie protestara, otro presidente que había llamado a la URSS "Evil Empire" debía ser el que se pusiera al lado del líder soviético Gorbachov, en el momento en que este iniciaba la apertura del sistema. Y yo opino que el apoyo de RR fue vital para Gorbachov, tanto a nivel personal como global: los ataques internos que recibía el último Secretario General del PCUS eran aliviados por las buenas relaciones con el otro bloque.
Así, cuando Reagan abandonó la presidencia en enero del 88, varias cosas habían cambiado en el movimiento conservador: por una parte, habían logrado consolidar su dominio ideológico sobre el país; incluso los políticos demócratas debían utilizar el lenguaje republicano para comunicarse con el electorado. Pero también había desaparecido la principal amenaza en la política exterior de los Estados Unidos, que había sido uno de los principales motivos para la unificación de movimientos tan dispares en uno solo: la URSS ya no era un enemigo, y en breve desaparecería definitivamente. ¿Qué haría el nuevo Presidente republicano, George H.W. Bush?
2 comentarios:
Te felicito por el artículo. Me gusta. El mayor logro de Ronald Reagan fue convertir en republciano el mensaje populista. El populismo normalmente había sido cosa de los demócratas que lo utilizaban para movilizar a los descontentos. Reagan demostró que un republicano podía ser el candidato de los descontentos. Invirtió los papeles tradicionales de los partidos.
Por cierto, hace tiempo encontré unos videos de la noche electoral de 1980. Te gustarán.
Saludos!
Me ha encantado este artículo. Lo he encontrado a raíz de uno muy breve que he escrito sobre la caída de la URSS y el papel de Reagan al lado del líder soviético. Ya te digo muy breve y nada comparado con el tuyo.
También abordé, pero en otra entrada mia, que las diferencias entre Brzezinski y Cyrus Vance dieron a Carter una política errática y contradictoria.
Enhorabuena por el artículo, me parece fabuloso.
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